Cuidado Vitamina B y Cáncer

Vitamina B.

El ácido fólico, también conocido como vitamina B9, es una vitamina del grupo B que desempeña un papel crucial en el crecimiento celular y la salud en general. Se encuentra en alimentos como las hojas verdes y es considerado esencial para diversas funciones en el organismo.

Uno de los aspectos más conocidos sobre el ácido fólico es su importancia durante el embarazo, donde se requiere para el desarrollo adecuado del feto y para prevenir defectos en el tubo neural. De hecho, en Estados Unidos, se ha implementado la fortificación de harina con suplementos de folato para garantizar un suministro adecuado de esta vitamina a la población.

Sin embargo, a lo largo de los años, se han llevado a cabo investigaciones para comprender mejor los efectos del ácido fólico en la salud, especialmente en lo que respecta a las enfermedades cardíacas y el cáncer. Los estudios realizados en las décadas de 1980 y 1990 sugirieron que una dieta deficiente en folato podía aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer, como el colorrectal. Esta evidencia llevó a un entusiasmo generalizado por el uso de suplementos de vitamina B en la década de 2000. Sin embargo, un estudio a gran escala en el 2006 llamado HOPE2 arrojó resultados contradictorios. Este ensayo aleatorizado no encontró evidencia de que el uso de suplementos de vitamina B12 redujera las enfermedades cardíacas[i] y, lo que es más preocupante, reveló un aumento del riesgo de cáncer de colon y próstata en ciertos grupos de personas que tomaban estos suplementos.

Estos hallazgos plantearon preguntas importantes sobre la relación entre el ácido fólico y el cáncer. ¿Cómo era posible que un nutriente esencial como el folato tuviera un efecto negativo en la prevención del cáncer? La respuesta radica en la forma en que el cáncer interactúa con los nutrientes en el cuerpo.

El cáncer es un proceso caracterizado por el crecimiento y la proliferación descontrolada de células anómalas. A diferencia de las células normales, las células cancerosas tienen una alta demanda de nutrientes debido a su crecimiento acelerado. Esto significa que, cuando se les proporcionan grandes cantidades de nutrientes, como el ácido fólico, las células cancerosas pueden aprovecharlo para crecer aún más rápido. Se aumentaba en 36% de padecer cáncer de colón y 21% de próstata. Pero esto no termina ahí, el ensayo clínico de prevención de pólipos intestinales grandes con el tratamiento de aspirina y folato encontró que la ingesta de suplementos de folato durante 6 años había incrementado el riesgo de padecer cáncer en estadio avanzado en un 67%[ii].

En otro estudio llevado a cabo por Ambrosone en el 2019[iii] en este caso el cáncer de mamá las personas que consumían altas dosis de vitamina b 12 tenían más probabilidades de sufrir una recaída y morir a consecuencia de esto.

Pero esto sigue, si esto no le parce alarmante, le señalo que dos grandes estudios el de Vitamina Noruega (NORVIT) y el de Intervención de Vitamina B del Oeste de Noruega (WENBIT) confirmaron que el uso de Vitamina B a altas dosis no reducía las enfermedades cardiacas y aumentaba en un 21% las posibilidades de tener cáncer y en 38% de morir por esta enfermedad, señalo que hacen referencia al uso a grandes dosis.[iv] [v] [vi]

En resumen, mientras que el ácido fólico es esencial para muchas funciones del cuerpo, su consumo en dosis altas puede beneficiar más a las células cancerosas que a las células normales. Esto ha llevado a la conclusión de que, en el tratamiento y la prevención del cáncer, es esencial encontrar un equilibrio y evitar proporcionar cantidades excesivas de nutrientes que puedan acelerar el crecimiento del cáncer.

El estudio del Dr. Sydney Farber en 1947, quien experimentó tanto con el uso de ácido fólico como con su inhibición en pacientes con cáncer incurable, marcó un hito en la historia de la quimioterapia.

Este descubrimiento condujo al desarrollo de tratamientos efectivos para el cáncer y subraya la importancia de adaptar los enfoques médicos según las evidencias científicas disponibles y la comprensión en constante evolución de cómo interactúan los nutrientes y el cáncer en el organismo.

Farber el padre de la quimioterapia moderna, probó a dar suplementos de folato a 90 pacientes que tenían un cáncer incurable y se produjo una aceleración el crecimiento los pacientes empeoraron no mejoraron[vii].

Farber como gran científico que era tuvo la capacidad de cambiar de opinión, capacidad que otros muchos no tienen, En este sentido pasó a administrar aminopterina inhibidor del folato, supuso que si el ácido fólico empeoraba el estado de salud de los pacientes inhibirlo podría beneficiarlo este paso fue esencial en el inicio de la quimioterapia. Los pacientes con leucemia mostraron una mejoría casi milagrosa.

En este sentido se puede decir que las células cancerosas crecen con ahínco y las vitaminas en altas dosis promueven el crecimiento celular es así de simple.

Los folatos, también conocidos como folacina o vitamina B9, son un grupo de compuestos químicos esenciales para el funcionamiento adecuado del organismo humano. Están involucrados en una variedad de procesos biológicos, incluyendo la síntesis y reparación del ADN, la producción de glóbulos rojos, y el metabolismo de los aminoácidos.

En el contexto de la oncología, los folatos desempeñan un papel importante debido a su influencia en la división y replicación celular. La relación entre los folatos y el cáncer se ha investigado extensamente a lo largo de los años, y se han identificado diferentes aspectos de esta relación:

Suplementos de folato y riesgo de cáncer: Algunos estudios sugieren que el consumo de suplementos de folato en dosis elevadas podría estar relacionado con un aumento del riesgo de ciertos tipos de cáncer, como el cáncer de colon o próstata. Esto se debe a que las células cancerosas, que tienen una alta tasa de división celular, pueden aprovechar el folato adicional para su crecimiento descontrolado.

Metotrexato: El metotrexato es un medicamento ampliamente utilizado en el tratamiento del cáncer y otras enfermedades autoinmunitarias. Funciona como un inhibidor de la dihidrofolato reductasa, una enzima clave en la síntesis de folatos. Al bloquear esta enzima, el metotrexato interfiere con la capacidad de las células cancerosas para sintetizar ADN y crecer, lo que lo convierte en un agente quimioterapéutico efectivo.

Folatos en la dieta: Consumir una dieta rica en folatos provenientes de alimentos naturales, como verduras de hojas verdes, legumbres y frutas cítricas, se considera beneficioso para la salud en general. Los folatos dietéticos son absorbidos de manera controlada por el cuerpo y no parecen tener el mismo efecto de promoción del crecimiento celular que los suplementos en dosis elevadas.

En resumen, los folatos son esenciales para la función celular normal y son necesarios para el crecimiento y la replicación celular. Sin embargo, en el contexto del cáncer, su relación es compleja, y la administración de suplementos en dosis elevadas debe hacerse con precaución, especialmente bajo supervisión médica. Los tratamientos que afectan a la síntesis de folatos, como el metotrexato, son fundamentales en la quimioterapia oncológica para inhibir el crecimiento de las células cancerosas.

Bibliografía consultada. 

[i] E. Lonn et al 2006. Heart Outcomes Prevention Evaluation (HOPE) 2 Investigators: Homocisteine Lowering with Folic Acid and B Vitamins in Vascular Disases. New England Journal of Medicine, 354, 1567-1577

[ii] B.F.Cole et al 2007. Ácido fólico en la prevención del cáncer colorrectal estudio randomizado. JAMA, 297(21),2351-2359

[iii] C.B. Ambrosone. 2019. Dietary Supplement Use During Chemotherapy and Survival Outcomes of Pacients with Breast Cancer Enrolled in a Cooperative Group Clinical Trial (SWOG SO221) Journal of Clinical Oncology

[iv] K.H Bonna et al 2006. Hnmocisteine Lowering and cardiovascular Events after Acute Myocardial Infarction. New England Journal of Medicine, 354 (15), 1578-1588

[v] M. Ebbing et al 2008. Mortality and Cardiovascular Events in Patients Treated with Homocitsine-lowering B Vitamins after Coronary Angiography: A Ranromized Controlled Trial. JAMA, 300 (7),795-804

[vi] M. Ebbing et al 2009. Cancer Incidence Mortality after Tratament with Folic Acid and vitamina B12. JAMA, 302 (19),2119-2126

[vii] S.Farber et al 1947. The Action of Pteroylglutamic Conjugates on Man. Science, 106,619-621